Antes de analizar cada gasto, es fundamental comprender la situación cambiaria del país vecino. La estabilidad del peso uruguayo frente al dólar, en comparación con la moneda argentina, hace que los precios resulten más elevados.
Sin embargo, Uruguay brinda un beneficio importante a los turistas extranjeros: la devolución del Impuesto al Valor Agregado (IVA) en servicios turísticos abonados con tarjetas de crédito o débito emitidas en el exterior. Este reintegro es un factor de alivio que debe ser incorporado en la planificación del viaje.
El alojamiento representa la partida más significativa del presupuesto, con una amplia variación según la ubicación y la época del año (temporada alta o baja). Para una pareja, un hotel de cuatro estrellas o un departamento en una buena zona puede tener un costo nocturno que oscila entre 150 y 250 dólares, por lo que el total semanal arrancaría en más de 1.000 dólares y podría alcanzar los 1.800.
Para una familia tipo, el alquiler de una casa o un apartamento con dos dormitorios y comodidades puede fácilmente demandar entre 250 y 400 dólares por noche, en especial durante el mes de enero. De este modo, el cálculo para la semana podría ascender hasta los 2.800 dólares.
Otro punto crucial a presupuestar es la comida. Cenar o almorzar en restaurantes de Uruguay, particularmente aquellos que ofrecen carnes y pescados, puede tener un precio elevado. Una estrategia para economizar es alternar entre comer afuera y preparar alimentos en el lugar de alojamiento.
Para una pareja que desee darse gustos sin restricciones, el costo de uno o dos almuerzos y las cenas en restaurantes de nivel medio a alto podría situarse entre los 450 y los 700 dólares. Si a esto se le suman los desayunos y algunas comidas en el alojamiento, el gasto total partiría de los 600 dólares y podría acercarse a los 1.000.
En el caso de una familia, el primer concepto implicaría un desembolso de entre 800 y 1.200 dólares, más otros 300 a 450 dólares por los demás ítems. En resumen, se debería prever un mínimo de 1.100 dólares que podría elevarse hasta alrededor de 1.650 según las elecciones que se realicen.
Para quienes opten por viajar en auto desde Buenos Aires, el costo aproximado, incluyendo combustible y peajes, ronda entre los 200 y los 300 dólares ida y vuelta, dependiendo del vehículo.
Otra alternativa es la combinación Ferry rápido + Ómnibus, que para una pareja implica un desembolso de entre 250 y 350 dólares, mientras que para una familia puede ascender desde los 500 hasta los 700 dólares, según las edades de los niños.
Si la opción elegida es el avión hasta Montevideo y luego un traslado terrestre, el costo estaría entre 360 y 560 dólares para una pareja, y se duplicaría para el grupo familiar.
Es importante considerar que, si se llega en ferry o avión, el alquiler de un automóvil resulta casi imprescindible para moverse con autonomía. El alquiler de un vehículo de categoría económica o intermedia por siete días tiene un costo que parte de los 350 dólares y puede llegar a los 550, según el modelo.
A esto debe agregarse que el precio del combustible por litro es notablemente más alto que en Argentina, incrementando el costo del viaje por carretera, mientras que los peajes, aunque numerosos, tienen un valor moderado.
En conclusión, el presupuesto para una semana en Punta del Este para una pareja (sin incluir pasajes aéreos) arranca en los 2.000 dólares y puede superar los 3.000, en función de las preferencias y los lujos que se quieran permitir. Para una familia tipo, la cifra de partida sería de unos 3.300 dólares, con un tope que puede rondar los 5.000 dólares.