Martes 23 de Diciembre de 2025, 16:08

La prevención en ámbitos rurales es clave para reducir el riesgo de contagio, especialmente en zonas del NOA donde se confirmaron casos de la enfermedad transmitida por roedores. (Foto: Shutterstock)
Un brote de hantavirus genera alarma en las áreas rurales del norte salteño. Hasta el 22 de diciembre, las autoridades sanitarias provinciales han confirmado once contagios y cinco fallecimientos, una situación que pone en alerta a departamentos con fuerte actividad agrícola y ganadera.
La distribución de los casos se concentra en el departamento de Orán, con seis afectados, seguido por Anta y San Martín con dos cada uno, y un caso en Rosario de Lerma. Son regiones donde la vida en el campo, los asentamientos aislados y la proximidad con el monte elevan la posibilidad de contacto con los roedores que transmiten el virus.
Según informó el Ministerio de Salud local, siete de los pacientes tuvieron una evolución positiva y ya fueron dados de alta. Sin embargo, la cantidad de muertes registradas refleja la severidad que puede alcanzar esta patología si no es diagnosticada a tiempo.
El hantavirus es una infección viral aguda para la cual no hay vacuna disponible. Su principal vía de contagio es la inhalación de partículas presentes en los excrementos, saliva u orina del ratón colilargo, un roedor común en campos, montes y zonas periurbanas. Tareas cotidianas como limpiar galpones que han estado cerrados, acarrear leña o ingresar a viviendas deshabitadas pueden implicar un riesgo si no se adoptan medidas de precaución.
Uno de los mayores obstáculos es que los primeros síntomas —fiebre, dolores musculares y decaimiento— se asemejan a los de un cuadro gripal, lo que puede demorar la consulta con un médico y el diagnóstico correcto.
A nivel país, el último informe epidemiológico nacional registró un incremento del 17% en los casos respecto del promedio de años anteriores. Aunque la región Centro presenta la mayor cantidad de contagios, la situación en Salta vuelve a destacar la vulnerabilidad de las poblaciones rurales del Noroeste Argentino.
Las recomendaciones de prevención han sido reforzadas por las autoridades: mantener las viviendas limpias y aireadas, evitar acumular objetos en desuso, sellar grietas y hendijas por donde puedan ingresar roedores, desmalezar los alrededores de las casas y ubicar depósitos de granos y leña a una distancia prudente. También se subraya la necesidad de ventilar por al menos media hora los espacios que han permanecido cerrados antes de proceder a su limpieza.
En plena época estival, con un aumento en las labores rurales, el brote de hantavirus en Salta actúa como un recordatorio contundente: la prevención sigue siendo la medida más eficaz frente a una enfermedad silenciosa que reaparece en el norte del país.
