Durante una sesión especial del Concejo Deliberante de Yerba Buena, fue aprobada un nuevo incremento en la tarifa de taxis que se desempeñan en la «Ciudad Jardín». De esta forma, el costo de viajar en auto de alquiler quedó igualado con el de capital.
Desde el lunes 29 de febrero, la bajada de bandera pasará a costar $ 10 y la ficha, cada 100 metros y por minuto de espera, $ 1. Para tener una idea de lo que significará el aumento para el bolsillo, un viaje desde el shopping viejo hasta plaza Independencia costará unos $ 116. En tanto que ir desde la rotonda del pie del cerro, en avenida Aconquija, hasta El Cristo, saldrá poco más de $ 50.
El dictamen fue aprobado por unanimidad. Votaron a favor Pedro Albornoz Piossek -del macrismo- Lisandro Argiró, Maximiliano García y Lucas Cerúsico -del radicalismo-, José Macome y Marcelo Rojas -de Cambiemos Yerba Buena-, Walter “Kabuby” Aráoz -del justicialismo- y el presidente del cuerpo, Javier Jantus. Estuvieron ausentes el peronista Héctor “Pilón” Aguirre, quien viajó a Buenos Aires, y el radical Benjamín Zelaya, de licencia.
Enojados con el intendente
Pese a la aprobación absoluta que encontró la iniciativa, los ediles se motraron molestos por la forma del intendente, Mariano Campero, de llamar a sesionar, ya que el cuerpo se encuentra en receso. «“Hubo voluntad de cada uno de mis colegas para que esta sesión se concrete. Pero el método nos ha molestado. Podríamos haber trabajado con tranquilidad”, afirmó Maximiliano García ─correligionario del mandatario─, dirigiéndose a los choferes.
Por su parte, Albornoz Piossek dijo a diario «LA GACETA» que la convocatoria de Campero había sido improlija, y que no comprendía ese apuro, puesto que en unos días se inicia el período ordinario de sesiones. Opinó también que las problemáticas más graves del sector son el transporte ilegal y el otorgamiento excesivo de licencias.
El intendente no escatimó respuesta y aclaró que el llamado se fundamentó en el aumento del municipio vecino. «Había que igualar la tarifa con la que manejan los autos de la capital, que fue actualizada el lunes último», concluyó.
Durante una sesión especial del Concejo Deliberante de Yerba Buena, fue aprobada un nuevo incremento en la tarifa de taxis que se desempeñan en la «Ciudad Jardín». De esta forma, el costo de viajar en auto de alquiler quedó igualado con el de capital.
Desde el lunes 29 de febrero, la bajada de bandera pasará a costar $ 10 y la ficha, cada 100 metros y por minuto de espera, $ 1. Para tener una idea de lo que significará el aumento para el bolsillo, un viaje desde el shopping viejo hasta plaza Independencia costará unos $ 116. En tanto que ir desde la rotonda del pie del cerro, en avenida Aconquija, hasta El Cristo, saldrá poco más de $ 50.
El dictamen fue aprobado por unanimidad. Votaron a favor Pedro Albornoz Piossek -del macrismo- Lisandro Argiró, Maximiliano García y Lucas Cerúsico -del radicalismo-, José Macome y Marcelo Rojas -de Cambiemos Yerba Buena-, Walter “Kabuby” Aráoz -del justicialismo- y el presidente del cuerpo, Javier Jantus. Estuvieron ausentes el peronista Héctor “Pilón” Aguirre, quien viajó a Buenos Aires, y el radical Benjamín Zelaya, de licencia.
Enojados con el intendente
Pese a la aprobación absoluta que encontró la iniciativa, los ediles se motraron molestos por la forma del intendente, Mariano Campero, de llamar a sesionar, ya que el cuerpo se encuentra en receso. «“Hubo voluntad de cada uno de mis colegas para que esta sesión se concrete. Pero el método nos ha molestado. Podríamos haber trabajado con tranquilidad”, afirmó García ─correligionario del mandatario─, dirigiéndose a los choferes.
Por su parte, Albornoz Piossekdijo a diario «LA GACETA» que la convocatoria de Campero había sido improlija, y que no comprendía ese apuro, puesto que en unos días se inicia el período ordinario de sesiones. Opinó también que las problemáticas más graves del sector son el transporte ilegal y el otorgamiento excesivo de licencias.
El intendente no eludió planteos y aclaró que el llamado se fundamentó en el aumento del municipio vecino. «Había que igualar la tarifa con la que manejan los autos de la capital, que fue actualizada el lunes último», concluyó.
