Andrés «Pigu» Romero anunció su regreso al golf profesional para el año 2026, en una charla franca donde abordó las razones de su pausa y su preparación actual. En conversación con el medio local La Tribuna Amateur, el deportista tucumano reveló que su alejamiento de los torneos fue una decisión personal. «Mi estado anímico no era el mejor y opté por tomar distancia. Fueron elecciones importantes, que también me permitieron estar más presente con mi hija», explicó, dejando en claro que no se trató del fin de su trayectoria.
Durante ese tiempo, Romero reconoció haber sido uno de los jugadores menos dedicados al entrenamiento. «No soy el peor, pero sí de los que menos horas le ha dedicado a la práctica», admitió con honestidad. En ese marco, asumió su rol de ejemplo, pero subrayó que el alto rendimiento exige sacrificio: «Siempre lo sostuve: sin entrenar, sin trabajar y sin priorizar, es casi imposible alcanzar la cima». Al mismo tiempo, valoró el avance del golf nacional y destacó que más argentinos están compitiendo afuera, un factor que consideró vital para el crecimiento del deporte.
El «Pigu» también evocó uno de sus momentos cumbre, cuando se midió con las grandes estrellas del circuito mayor. «Tuve un nivel extraordinario durante todo un año. Pero más que el juego, tenía una mentalidad ganadora, sentía que podía con todo», recordó. En ese repaso, resaltó lo que significó competir frente a leyendas como Tiger Woods y Phil Mickelson: «Pararme ante esos gigantes y hacerles creer que podía vencerlos ya fue un logro enorme para mí».
De cara al futuro, Romero fue claro al describir su presente. «Jamás me había preparado físicamente como ahora», afirmó, y detalló que ese esfuerzo fue una manera de recuperar motivaciones tras dejar la competencia. «Pasar de la actividad total a la inactividad hizo que algunas cosas se descontrolaran. Necesitaba encontrar nuevos alicientes en la vida», confesó. Ese camino es el que hoy lo lleva a planificar su retorno: «Tengo fe en que a partir de 2026 puedo comenzar de nuevo. Ya lo logré una vez y estoy seguro de que puedo repetirlo».
En su análisis, el golfista también elogió a otros deportistas argentinos que mantuvieron carreras destacadas, mostrando respeto por trayectorias forjadas con dedicación y perseverancia. «Hay que reconocer el mérito de muchos, en diferentes disciplinas. Son un espejo de lo difícil que es llegar y permanecer», indicó, trazando un vínculo con su propia experiencia.
Finalmente, el tucumano puso en valor el lado más personal que le brindó el golf. Más allá de los triunfos deportivos, destacó los lazos que formó a lo largo de su carrera. «Lo que más atesoro es la gente que tengo cerca, los amigos que me dio este deporte», manifestó. Para Romero, esa red de apoyo es tan crucial como el entrenamiento y la competición, y será un sostén fundamental en este nuevo intento por recuperar un lugar protagónico en el circuito profesional.