La Fundación FEDEH anunció este domingo el deceso de su presidenta, Ana María Juárez de Cruz Prats, mediante un comunicado cargado de emoción difundido en sus plataformas digitales, donde manifestó el sentimiento de pérdida de toda la organización y enalteció su trayectoria y dedicación hacia la sociedad.
“Con enorme tristeza informamos el fallecimiento de Ana María Juárez de Cruz Prats, Presidenta de Fundación FEDEH”, comenzó diciendo la institución. En el texto, la fundación resaltó que Ana María fue “una guía entregada, laboriosa sin descanso y educadora con sus acciones”, y enfatizó que su moral, entrega al prójimo y perspectiva “marcaron profundamente a la Fundación y a la comunidad tucumana”.
Desde FEDEH subrayaron que su herencia perdura “en los principios que nos legó y en cada individuo al que apoyó”, al mismo tiempo que transmitieron su solidaridad “con consideración y cariño” a la familia y allegados. “Como colectivo, veneramos su recuerdo prosiguiendo la tarea que admiró y protegió”, finaliza el mensaje oficial.

En una conversación mantenida en 2023, durante la celebración por los 15 años de la fundación, Ana María Juárez de Cruz Prats rememoró los inicios de FEDEH y el significado profundo de su formación. “Estamos celebrando los 15 años de FEDEH. Esta entidad nace cuando pierdo a mi hijo a causa de la leucemia y él me solicita que en la provincia trabajemos para que los tucumanos, de forma solidaria, podamos establecer un centro de excelencia para el tratamiento de las enfermedades hemato-oncológicas”, manifestó en aquella oportunidad la presidenta de la organización.
En aquella entrevista, Juárez de Cruz Prats puso de relieve la labor mancomunada que la fundación realiza con las autoridades provinciales y el apoyo que esto significa para los trabajadores de la salud en Tucumán. En ese marco, destacó que la provincia posee “atención de primer nivel”, lo que posibilita ofrecer a los enfermos terapias de alta calidad.
“El amor supera al dolor”, fue una de las expresiones que compartió en esa charla, como resumen del espíritu que orientó su gestión al frente de la fundación y del apoyo constante a quienes padecen estas enfermedades. Al finalizar la nota, además, convocó a la sociedad tucumana a “festejar la vida, gozarla al máximo y transitarla con una sonrisa”.
En 2015, el periódico La Gaceta divulgó un amplio reportaje en el que trazó el recorrido que originó la fundación. Allí se mencionó que habían transcurrido nueve años desde el fallecimiento de su hijo, Federico Cruz Prats, quien murió a los 33 años luego de una batalla de nueve meses contra la leucemia. De acuerdo con ese relato, antes de morir Federico manifestó su anhelo de que se fundara en Tucumán un centro de excelencia para prevenir el desarraigo de los enfermos que debían trasladarse a otras provincias para recibir atención. Ana María Juárez de Cruz Prats adoptó ese mandato y siguió laborando en su memoria.
Ese mismo artículo especificó que, mediante un acuerdo con el Siprosa, se inauguró un servicio de Hematooncología en el Hospital Néstor Kirchner, donde FEDEH cooperó con la formación de profesionales para lograr parámetros de excelencia. En ese trayecto se sumaron consultorios, equipos para hospital de día y quimioterapia, y se planificó un sector de internación con cuartos individuales aislados.
La publicación también indicó que la fundación promovió jornadas de capacitación, pasantías en centros especializados de Buenos Aires y el acompañamiento continuo a médicos, enfermeros y farmacéuticos. Asimismo, se diseñó el Complejo FEDEH en Yerba Buena, que abarcaría una vivienda para pacientes ambulatorios y sus familias, un centro cultural y el Banco de Sangre de la Provincia.
Con el deceso de Ana María Juárez de Cruz Prats, FEDEH se despide de su principal figura, en tanto que su legado se plasma en una institución que surgió de un dolor íntimo y se afianzó como un ámbito de contención, capacitación y cuidado para pacientes con enfermedades hemato-oncológicas en Tucumán.
