El 1º de mayo de cada año se conmemora el Día Internacional del Trabajador en homenaje a los "Mártires de Chicago", así se denominó al grupo de sindicalistas anarquistas que fueron ejecutados en Estados Unidos por realizar un reclamo por la reducción de la jornada laboral a 8 horas.
El 1 de mayo de 1886, bajo el lema “ocho horas de trabajo, ocho horas de ocio y ocho horas de descanso” ,200 mil trabajadores iniciaron la huelga; mientras que otros 200 mil obtenían esa conquista con la simple amenaza de paro. En Chicago, donde las condiciones de los trabajadores eran mucho peores que en otras ciudades, las movilizaciones siguieron los días 2 y 3, cuando tras una batalla campal una compañía de policías procedió a disparar a quemarropa sobre la gente, produciendo seis muertos y decenas de heridos.
El día 4 hubo una convocatoria masiva en Haymarket Square. Allí, una persona que nunca fue identificada arrojó una bomba incendiaria que mató a siete policías e hirió a otros sesenta. Las fuerzas de seguridad reprimieron con disparos, dejando un saldo de muertos y heridos entre los trabajadores.
Por los graves acontecimientos, el 21 fueron enjuiciados 31 obreros acusados de haber sido los presuntos promotores del conflicto. Condenaron a dos de ellos a cadena perpetua, uno a 15 años de trabajos forzados y cinco a la muerte en la horca. Estas 8 personas se convirtieron en los Mártires de Chicago, y en su conmemoración se declaró que el 1° de mayo sería el Día Internacional del Trabajador.