Después de dos meses de mucha angustia contenida, llegó el alivio. Fiorella Piazza, la joven jugadora de hockey del club Tucumán TK, recibió el alta médica este martes. Ahora, continuará la recuperación en casa con la contención de sus seres queridos.
«Fio» expresó en diálogo con El Diario de Yerba Buena su alegría por dejar el sanatorio. Sin embargo contó que antes de emprender el regreso se tomó unos minutos para despedirse y agradecer a todos los médicos y profesionales que intervinieron en su cura. Es que los días que pasó en la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) la ayudaron a poner en foco los pequeños y grandes gestos que la ayudaron a salir adelante.
Por eso, también quiso enviar un mensaje muy especial a toda la comunidad del hockey tucumano que, desde un primer momento, se movilizó a través de WhatsApp y redes sociales con la campaña #FuerzaFio. Gracias a la repercusión que lograron, la leona «Maca» Rodríguez, las jugadoras del selecionado Naranja y hasta el gobernador Juan Luis Manzur concurrieron al sanatorio para brindarle palabras de aliento.
«Es increíble toda la movida que se generó, recibí mucho apoyo para recuperarme, agradezco a toda la gente que rezó por mí mientras estuve aquí», expresó emocionada la deportista, quien contó que ahora tiene un nuevo desafío que enfrentar.
Los próximos treinta días serán claves para recuperar la capacidad de su pulmón derecho, que fue seccionado en la primera intervención quirúrgica, que tuvo lugar el 25 de agosto pasado. Si Fio mantiene la constancia y realiza los ejercicios indicados por los especialistas de forma correcta, podría obtener el alta definitiva en febrero o marzo.
La mamá, Nancy Argañaraz, también quiso agradecer «a las chicas, a los padres, a toda la gente maravillosa que Dios puso en nuestro camino, muchísimas personas que se acercaron para preguntarnos cómo podía ayudarnos, eso es impagable», expresó emocionada.
Camino a la recuperación
La historia de Fiorella comenzó luego de un partido de hockey en la cancha de Natación. La jovencita vomitó sangre cuando terminó el encuentro e inició un largo peregrinar por consultorios médicos. El diagnóstico llegó de la mano de la neumonóloga Patricia Opitz, quien detectó que padecía una patología congénita conocida como «secuestro pulmonar» y ordenó su intervención en el mes de agosto.
Pero después de la operación se presentaron complicaciones y una Junta Médica resolvió una nueva cirugía, esta vez en el Hospital Centro de Salud y a cargo del doctor Carim Asus, para sustraer el líquido que se había acumulado en el pulmón derecho de Fiorella. A partir de ese momento, la recuperación tuvo sus vaivenes, con días mejores y peores, en los que pasó del hospital a un sanatorio privado, y de un cuarto a la Unidad de Terapia intensiva.
Allí, la visitaron jugadoras de los distintos equipos que se encontraban disputando el Campeonato Argentino de Mayores en las canchas de Natación, quienes se enteraron de la situación que estaba atravesando Fio por las publicaciones que inundaron las redes sociales para alentar su vuelta al club.
Días después, Fiorella mejoró los parámetros paulatinamente, la fiebre que la llevó a la UTI cedió, y volvió a un cuarto común hasta recibir el alta médica.
En la jornada de ayer, la familia Piazza escuchó la mejor noticia: Fio ya estaba en condiciones de volver a casa para iniciar la segunda etapa del tratamiento que le posibilitará estar muy pronto de nuevo en las canchas.
Fiorella con la doctora Patricia Opitz antes de recibir el alta